Versatilidad, sostenibilidad y asepsia, rasgos de la arquitectura sanitaria actual
- El Hospital General organiza un encuentro entre arquitectos y médicos con motivo del V Centenario
Un grupo de arquitectos, el equipo directivo y algunos de los médicos del Hospital General Universitario de Valencia, guiados por el autor del nuevo edificio quirúrgico, José María Tomás Llavador, han visitado esta mañana las instalaciones del mismo, cuya obra finalizará el próximo mes de junio.
El nuevo edificio ampliará y mejorará notablemente los dispositivos quirúrgicos del hospital de modo que sus necesidades estén cubiertas a medio y largo plazo.
“Versatilidad, sostenibilidad, tecnología y asepsia” son los rasgos que definen la arquitectura sanitaria del siglo XXI según han destacado los arquitectos que han intervenido en el nuevo edificio quirúrgico. Con motivo del ciclo de conferencias del V centenario del Hospital General se ha organizado un encuentro sobre arquitectura hospitalaria e innovación funcional y tecnológica celebrado hoy en uno de los quirófanos del nuevo edificio. El Colegio Territorial de Arquitectos de Valencia se ha sumado a la actividad, incluyéndola en su agenda de visitas mensuales programadas.
El arquitecto Felipe Pich-Aguilera ha puesto el acento en la necesidad de reformular la gestión energética y para ello la edificación es una pieza clave en cuanto que es una de los principales consumidores. “Las leyes naturales de la termodinámica, la iluminación natural, la integración de la vegetación, entre otros factores, consiguen ahorros energéticos importantes. Ese es uno de los aspectos distintivos de los nuevos quirófanos del Hospital General, dotados de luz natural y de las últimas tecnologías”, ha señadado.
Wendelin Hinsch ha destacado la distribución de espacios del nuevo bloque quirúrgico que, con un innovador esquema, permite la cercanía de la UCI a la zona quirúrgica, acortar itinerarios de desplazamiento interno, tanto para el personal como para los pacientes y acortar recorridos verticales, que son mínimos. Asimismo, permite mayor superficie asistencial y menor para la destinada a residuos de lo que es habitual en otros centros hospitalarios.
Para el catedrático de historia de la ciencia de la Universidad de Valencia, Josep Lluis Barona “los cambios en la arquitectura hospitalaria están relacionados con la concepción y la percepción de la enfermedad, su significación social y el desarrollo de los deberes y prácticas médicas. Barona ha analizado diversos ejemplos de arquitectura hospitalaria desde la Edad Media hasta los más modernos hospitales de especialidades, pasando por los sanatorios marítimos y los asilos psiquiátricos.
Nuevo edificio quirúrgico
Un total de 21 quirófanos de cirugía programada con y sin ingreso y de cirugía de urgencia, unidades de recuperación postquirúrgica, unidad de adaptación al medio y unidad de críticos, componen la dotación asistencial del edificio. Dispondrá también de servicios complementarios y áreas generales con zona de recepción y de consultas, además de espacios de reserva para crecimiento posterior de nuevas actividades.
La conexión con el resto del hospital se ha hecho a través de un túnel iluminado en el sótano y una pasarela en la primera planta que conecta el edificio quirúrgico con el pabellón A.
Todas las instalaciones de climatización son exteriores, van por fachada, ocultas bajo el recubrimiento de la misma para facilitar las reparaciones, de modo que el mantenimiento es sencillo e independiente de las diferentes estancias. En caso de averías o controles rutinarios, la actividad en la zona quirúrgica no se ve afectada.
La logística del edificio y el suministro de material se producen mediante un sistema robotizado.
Con una inversión de 18.418.521 €, es un edificio versátil que permitirá una gran optimización de recursos, con espacios y servicios comunes, donde se han extremado las condiciones de asepsia en las zonas de trabajo.
Estado de la obra
La obra está en un punto muy avanzado, en cuyo recorrido se ha mostrado la complejidad de un proyecto de estas características y sus fases correspondientes.
Los quirófanos ya disponen de los revestimientos finales en paredes y techo. En el caso del pavimento, ya está instalado, a falta del acabado final que no se realiza hasta el último momento por cuestiones de asepsia. El edificio está herméticamente cerrado. Falta el velo de la chapa grecada de acero microperforado lacado en colores, elemento característico del proyecto.