El General de Valencia introduce una técnica laparoscópica innovadora y cirugía robótica para tratar la obesidad mórbida
- El cruce duodenal en un asa (SADI-S) por vía laparoscópica aporta mejores resultados, reduce el tiempo quirúrgico y los efectos secundarios
- También se inicia el tratamiento con cirugía bariátrica robótica, mediante la ayuda del robot Da Vinci, que aporta gran precisión
- Con estas técnicas se consigue una pérdida de peso y se disminuye el rebote o reganancia de peso y la reaparición de enfermedades asociadas a la obesidad
El Hospital General de Valencia ha introducido en su cartera de servicios una técnica quirúrgica por vía laparoscópica innovadora para el tratamiento de la obesidad mórbida.
Esta técnica, denominada cruce duodenal en un asa (SADI-S) por vía laparoscópica, es una simplificación de técnicas anteriores que aporta menores efectos secundarios con los mejores resultados que cirugías más complejas y agresivas.
Consiste en realizar una gastrectomía vertical (cortar y extraer una parte del estómago) para reducir así la absorción de nutrientes por el organismo. Posteriormente, se realiza una anastomosis duodeno-ileal por vía laparoscópica (conexión quirúrgica entre el duodeno y el intestino delgado dejando un canal común).
La primera intervención la ha llevado a cabo la responsable de la unidad Funcional de Obesidad, Cristina Sancho, cirujana bariátrica acreditada por la Sociedad Española de Cirugía de la Obesidad.
Tal y como ha explicado Sancho, “con esta técnica innovadora disminuimos la reganancia de peso y la reaparición de enfermedades asociadas a la obesidad en estos pacientes. La realización de una única anastomosis implica una disminución del tiempo quirúrgico y de las complicaciones postoperatorias, como el reflujo biliar o la aparición de las hernias internas”.
Al hacerse por vía laparoscópica, a través de pequeñas incisiones, las cicatrices son más pequeñas, se disminuye el dolor, la recuperación es más rápida y el paciente permanece menos tiempo ingresado.
El jefe de la sección de Cirugía Esofagogástrica, Carlos Redondo, ha explicado que, aunque esta técnica tiene numerosas ventajas, “no es una técnica exenta de complicaciones, por lo que debe hacerse siempre de forma protocolizada, mediante equipos multidisciplinares y en centros experimentados en cirugía bariátrica y metabólica, como nuestro hospital”.
En la unidad Funcional de Obesidad participan endocrinos, psiquiatras, psicólogos, nutricionistas, neumólogos, cirujanos plásticos y cirujanos digestivos.
Cirugía bariátrica robótica
El Hospital General también ha empezado a tratar la obesidad con la cirugía bariátrica robótica, mediante la ayuda del robot Da Vinci.
Esta técnica aporta gran precisión gracias a la visión tridimensional, que ayuda al cirujano a identificar las estructuras anatómicas durante la cirugía, y a los brazos robóticos, que pueden moverse en ángulos y direcciones que permiten al cirujano llegar a todas las zonas de forma más segura y controlada.
La cirugía bariátrica robótica mejora los resultados, reduce el dolor postoperatorio, garantiza una rápida movilización y disminuye los riesgos de complicaciones postoperatorias del paciente.
El servicio de Cirugía General y Digestiva del Hospital General realiza anualmente una media de 4.000 intervenciones, incluyendo urgentes y programadas, de las que 70-80 cirugías son para el tratamiento de obesidad.
Durante el último año se ha potenciado la unidad de Cirugía de la Obesidad Mórbida, con una mayor implicación y dedicación de sus miembros, el desarrollo de protocolos específicos y la simplificación y actualización de las técnicas quirúrgicas.