El General de Valencia celebra el curso ‘Linfomas Hoy: Actualización interdisciplinar del diagnóstico a la terapia personalizada’
- Se ha abordado la incorporación de herramientas genéticas y moleculares de última generación, el papel de las técnicas radiológicas y metabólicas y las nuevas estrategias terapéuticas
El Hospital General de Valencia ha celebrado el curso ‘Linfomas Hoy: Actualización interdisciplinar del diagnóstico a la terapia personalizada’, una iniciativa formativa que tiene como objetivo profundizar en el conocimiento del diagnóstico y tratamiento de las neoplasias linfoides.
El curso se ha estructurado en tres jornadas temáticas, articuladas en torno a diversas ponencias y mesas redondas que cuentan con la participación de especialistas en Hematología, Anatomía Patológica, Radiología, Dermatología, Oncología Radioterápica y otras disciplinas implicadas en el manejo de las neoplasias linfoproliferativas.
El curso está dirigido a facultativos especialistas y residentes de Hematología, Medicina Interna, Anatomía Patológica, Dermatología, Radiología, Farmacia Hospitalaria, Biólogos/Biotecnólogos y Enfermería oncohematológica del Departamento y su Área Sanitaria Integrada (ASI), así como a profesionales de otros centros de la Comunidad Valenciana interesados en el abordaje integral de las neoplasias linfoides.
Novedades en diagnóstico y tratamiento
Entre los temas que se han abordado destacada la incorporación de herramientas genéticas y moleculares de última generación en el diagnóstico, así como el papel de las técnicas radiológicas y metabólicas para definir la extensión y respuesta al tratamiento.
Asimismo, se han presentado las nuevas estrategias terapéuticas, entre ellas las terapias dirigidas, inmunoterapia y terapia celular y la importancia de los comités y unidades multidisciplinares como modelo asistencial de referencia, en línea con las recomendaciones del Grupo Español de Linfomas (GELTAMO, 2024).
Tal y como se ha expuesto, en los últimos años el diagnóstico y tratamiento de los linfomas han experimentado una transformación profunda, impulsada por los avances en biología molecular y genética, que permiten caracterizar mejor cada tipo de linfoma y seleccionar terapias más específicas.
A ello se suma el desarrollo de inmunoterapias y terapias celulares, que han cambiado el paradigma terapéutico. Estos progresos han hecho imprescindible el trabajo coordinado de distintos especialistas para ofrecer una atención verdaderamente personalizada.